Comentario: Dices: "...me
cuesta muchísimo soltar quien no soy por miedo a no ser feliz..." Pero
si ahora mismo no eres feliz, ¿entonces qué diferencia hay si sueltas lo que no
eres o si no? ¿Que diferencia hay entonces en poner en práctica el perdón o no?
¿Ves que demente el sistema de pensamientos del ego es? No eres feliz, y ahora,
al identificarte con su sistema de pensamientos, tienes miedo de poner en
práctica el perdón, que es la ÚNICA salida, por miedo a no ser feliz, por miedo
a soltar tu identidad. De nuevo, cuándo ahora mismo no eres feliz. ¿No puedes
ver la locura en esa forma de pensar?
Sin embargo, vamos a arrojar un poco
de claridad sobre tu inquietud para que seas consciente de lo que el perdón es,
y para lo que sirve. El perdón NO ES para que sueltes tu identidad, aunque
eventualmente, muy amorosamente te lleva a ello. El perdón NO ES para que
desaparezca este mundo, aunque eventualmente, muy amorosamente te lleva a ello.
El perdón NO ES para que termines experimentando un vacío ni nada así por el
estilo. El perdón ES UNICAMENTE para restaurar la paz en tu mente. Esa paz QUE
AHORA MISMO NO TIENES, y que el ego te dice que si practicas el perdón pierdes
tu identidad, desparece tu mundo, terminarás experimentando un vacío muy
doloroso, bla, bla bla...
Por lo que veo, en realidad no
quieres poner en practica el perdón, aun cuando dices que si. Y la razón es
porque te has creído que tu identidad es una persona sufrida, llena de miedo, y
soltar esas historias poniendo el práctica el perdón te llevaría a estar en
paz, lo que dices que deseas pero no quieres. Porque de nuevo, estar en paz
deshace tu identidad como alguien que desea sufrir. Y esto no es para que te
sientas mal. todos padecemos de ese mismo síndrome de una manera u otra al
haber elegido la experiencia de ser cuerpos separados. Así que lo que te
comparto a ti se que es también para mi de una manera u otra. Por eso mis
escritos son para que juntos recordemos.
Volviendo a tu pregunta, es como si
tienes los ojos vendados, no puedes ver nada, y estas agarrado a una cuerda que
no quieres soltar por miedo a caer a un precipicio que en realidad no existe.
Pero en tu mente si existe. Pides ayuda y alguien que puede ver te dice,
"suelta esa cuerda que tanto te hacer sufrir". Y tú le dices,
"no, porque si la suelto me voy a caer y me voy a matar." Y esa
persona te pregunta, ¿cómo es posible que te vayas a caer y te vayas a matar si
estas solo a 5 centímetros del suelo? Y tu le contestas, "no, estoy a 500
metros del suelo." Y la persona te pregunta, "¿y cómo sabes eso, si
tienes los ojos vendados?" Y tu le respondes, "porque eso fue lo que
me dijeron los que me vendaros los ojos y por eso no puedo soltar esa
cuerda."
Eso es lo que está ocurriendo
contigo. Has creado una película aterradora en tu mente sobre el perdón, quizás
por haber malinterpretado el curso, o por lo que hayas escuchado por ahi. Sin
embargo, no te estoy pidiendo, ni siquiera que confíes en mi. Solo te pido,
ríndete. Suelta, y observa cómo te sientes, solo por esos momentos en los que
tu mente está libre de historias. Esa es la prueba directa, experiencial, no
teórica, de lo que el perdón hace con tu mente si te abres a su práctica. Ahora
es cuestión de perdonar una y otra, y otra, y otra...vez. Hasta que perdonar
sea lo que realmente desees en cada momento. Y de nuevo, no es tu mundo, no es
tu identidad lo que va a "desparecer" por el hecho de poner en
practica el perdón. Es todo ese miedo QUE AHORA MISMO SIENTES sin ni siquiera
haber puesto en practica el perdón, lo que desaparece. En ese caso, SUELTA LA
CUERTA (PERDONA), pues no tienes nada que perder.
Finalmente cuando preguntas,
"Nick como aplicar el curso a esto que me esta pasando?" Deja que el
curso mismo te lo conteste: "El perdón, en cambio, es tranquilo y
sosegado, y no hace nada. No ofende ningún aspecto de la realidad ni busca
tergiversarla para que adquiera apariencias que a él le gusten. Simplemente
observa, espera y no juzga." W-pII.1.4:1-3
Ahora es cuestión de que tu voluntad
sea la paz de Dios, y la vida te llevará de la mano, presentando los recursos y
el apoyo que sea necesario para ti, en tu camino de regreso a Casa.