Monday, February 12, 2018

El Milagro No Te Despierta, Sino Que Simplemente Te Muestra Quién Es El Soñador

"El milagro no te despierta, sino que simplemente te muestra quién es el soñador. 3Te enseña que mientras estés dormido puedes elegir entre diferentes sueños, dependiendo del propósito que le hayas adscrito a tu soñar. 4¿Deseas sueños de curación o sueños de muerte? 5Un sueño es como una memoria, en el sentido de que te presenta las imágenes que quieres que se te muestren." T-28.II.4:2-5

Comentario: Me encanta utilizar extractos del curso como este para observar cuán fácilmente el sistema de pensamientos del ego los utiliza a su favor. Cuando habla de que puedes elegir entre diferentes sueños, sueños de muerte o sueños de curación, el ego inmediatamente trae la atención a la forma y lo interpreta como decir, que puedo elegir los escenarios que deseo en el mundo, como por ejemplo, cambiar la condición financiera, condición física, atraer lo que deseo, y así sucesivamente. Eso es a lo que se le conoce como un intercambio de ilusiones.

Sin embargo, lo que el Curso hace hincapié es que el sueño de muerte es la experiencia de percibirme como algo separado de Dios, en este caso, un cuerpo en el mundo de separación. Por consiguiente, no importa lo que tenga lugar en el mundo de los sueños, sigue siendo un sueño de muerte. Por eso entre muchos extractos, solo citando uno de ellos, el curso nos recuerda, “Curar un efecto y no su causa tan sólo puede hacer que el efecto cambie de forma. Y esto no es liberación." T-26.VII.14:2-3

Miremos ese extracto con los paréntesis añadidos; “Curar un efecto (cualquiera que sea la situación en mi mundo que quiera cambiar por otra "diferente" o "mejor") y no su causa (creencia en la separación en la mente) tan sólo puede hacer que el efecto cambie de forma (la situación cambie de forma). Y esto no es liberación (no es liberación porque todavía creo estar separado de Dios viviendo una experiencia física).” T-26.VII.14:2-3

Sueños de curación tienen que ver con ser consciente de que mi paz y mi felicidad no depende de lo que tenga lugar en el sueño al ser consciente de lo que soy, ya que como dice el extracto del Curso que aquí comparto, "El milagro no te despierta, sino que simplemente te muestra quién es el soñador."

Cuando soy consciente de que soy el soñador del sueño, lo que se va curando no es el personaje "yo" que me creo ser. Es la mente que sueña este sueño. En ese sentido, al cambiarle el propósito ("...dependiendo del propósito que le hayas adscrito a tu soñar.") a cada una de las experiencia que tengo, el Espíritu Santo utiliza el sueño para curar la mente. Cambiarle su propósito simplemente significa, si las quiero utilizar para seguir distrayendo a la mente con el sueño, o si las quiero utilizar para perdonar.

Si reconozco que mi única función es perdonar, y por consiguiente utilizo cada uno de los escenarios en mi vida para cumplir esa única función, en ese sentido, deseo sueños de curación. Cuando un estudiante del Curso tiene esto claro, y no confunde los niveles, se da cuenta lo simple que es este material, que por algo el curso mismo nos recuerda, "...este curso es la simple enseñanza de lo obvio." T-30.IV.7:7

No dije que fuese fácil ya que la resistencia psicológica (culpa inconsciente) es un obstáculo muy fuerte. Pero el Espíritu Santo, si se lo permitimos, al elegir el perdón como nuestro único propósito, va deshaciendo el miedo (culpa inconsciente), y la mente poco a poco se va despertando del sueño (curando). Por eso, la misma sección que contiene el extracto que compartí del curso cierra con el siguiente párrafo, y lo que está en paréntesis se lo he añadido yo:

"Este mundo está repleto de milagros (oportunidades para cambiar de mentalidad). Se alzan en radiante silencio junto a cada sueño de dolor y sufrimiento, de pecado y culpabilidad. Representan la alternativa al sueño (el deseo por la verdad), la elección de ser el soñador, en vez de negar el papel activo que has desempeñado en la fabricación del sueño. Los milagros son los felices efectos de devolver la enfermedad -la consecuencia- a su causa (causa es que soy mente soñando y los efectos es el sueño mismo). El cuerpo se libera porque la mente reconoce lo siguiente: `Nadie me está haciendo esto a mí, sino que soy yo quien me lo estoy haciendo a mí mismo´. Y así, la mente queda libre para llevar a cabo otra elección (elegir entre el sistema de pensamientos del ego y el del Espíritu Santo. No ´elegir´ entre lo que tenga lugar en el mundo porque aquí no hay nada, no hay ´mundo´). A partir de ahí, la salvación procederá a cambiar el rumbo de cada paso que jamás se haya dado en el descenso hacia la separación, hasta que lo andado se haya desandado, la escalera haya desaparecido y todos los sueños del mundo hayan sido des-hechos." T-28.II.12:1-7