Pregunta: "Saludos Nick, estoy haciendo las lecciones pero el ego me sigue poniendo en mis pensamientos que este camino es encerrado. Esto se basa en mis creencias "cristianas" Pero tengo esa duda ¿podrías aclarar esto?”
Comentario: El cristianismo, que es simplemente una etiqueta más, tal como
se ha enseñado está basado en culpa, en especialísimo, en separación. Y lo
reconoces simplemente porque sientes la culpa, te sientes separado de tus
hermanos ya que están los "cristianos" y los "no
cristianos". También le tienes miedo a Dios, miedo a ser castigado, te
sientes pecaminoso, juzgas, te juzgas, te juzgan, etc. Sin embargo, cuando
pones en practica el Curso, y vas experimentando la paz de saber que eres
inocente, SIEMPRE Y EN TODO MOMENTO, por el mero hecho de lo que eres, no
importa lo que hagas, ese és el testimonio de que el mensaje del curso tiene
que de alguna manera ir mas en acorde con un Dios que ama. No con uno que
castiga. Y no solo el Curso, cualquier practica que de alguna manera te apoye a
restaurar la paz en tu mente, que te acerque mas al amor de Dios, libre de
culpa, libre de miedo, sentido común te diría que va mas en acorde con lo que
un Dios amoroso haría por su hijo. Por eso es que el Curso no es el único
camino, sino que un entre muchos. Tal como nos lo recuerda en su prefacio,
"Aunque se enfoque es cristiano, el Curso aborda temas espirituales de carácter
universal. Subraya que no es más que UNA DE LAS MUCHAS VERSIONES del programa
de estudios universal, y que difiere de las demás sólo en su forma. En última
instancia, todas conducen a Dios." (Prefacio UCDM)
Ahora, como Un curso de milagros va
dirigido a deshacer la culpa inconsciente, la que sin darnos cuenta DESEAMOS
SOSTENER, existe una resistencia. Y es que no queremos soltar el mundo que
hemos fabricado porque creemos que al hacerlo perdemos algo. No nos damos
cuenta que lo opuesto es verdad, que si soltamos el mundo que hemos fabricado,
no perdemos nada, sino que lo ganamos ¡todo! Por algo el Curso nos recuerda:
"No pides demasiado de la vida, al contrario, pides demasiado poco. Cuando
dejas que tu mente se ocupe de asuntos corporales, de las cosas que compras y
de lo que es eminente de acuerdo con los valores del mundo, estás invitando al
pesar, no a la felicidad." W-pI.133.1-2
Esa oscilación entre dos sistemas de
pensamientos diametralmente opuestos se experimenta como un conflicto muy
doloroso. Y es aquí donde la duda se cuela. Sin embargo, cuando eliges el
sistema de pensamientos del Espíritu Santo, experimentas paz, y eso es
¡inmediato! De la misma manera, cuando eliges el sistema de pensamientos del
ego, experimentas conflictos, y eso también es !inmediato¡ De hecho, el
conflicto que ahora mismos experimentas, es porque ya has elegido el sistema de
pensamientos del ego, el que te dice que el curso es un camino herrado, etc.
¿Quieres poner esto a prueba por un
instante? Ríndete completamente, en plena aceptación de tu experiencia
presente. ¡Ríndete! ¡Suéltalo todo! Si lo haces de corazón, no vas a poder sino
que experimentar un alivio. ¿No es eso suficiente testimonio para darte cuenta
que tu paz la tienes al alcance? Solo que la mente no entrenada, empieza ahora
a fabricar historias a la velocidad de la luz, y vuelve el conflicto. Eso es
todo. Por eso es que Un curso de milagros es un ENTRENAMIENTO MENTAL, no una
lectura. A eso se debe que en la introducción del Libro de Ejercicios nos dice,
"Una mente sin entrenar no puede lograr nada." W-pI.In.1:3 Y esto
aplica a todo. Un buen futbolista tuvo que patear la pelota millones de veces
antes de dominarla. ¿Pues hay que elegir de nuevo, una y otra vez el sistema de
pensamientos del Espíritu Santo para que se convierta en un hábito.
Es por eso que Jesús en el curso nos
advierte: "Es mucho más eficaz que te recuerde que no ejerces suficiente
vigilancia con respecto a tus pensamientos." T-2.VII.1:7 O "Observa
cuánta vigilancia has estado dispuesto a ejercer para proteger a tu ego, y cuán
poca para proteger a tu mente recta." T-4.III.10:3 Inclusive, Jesús mismo
dice que escuchar solo la Voz del Espíritu Santo fue su última lección que
aprendió. Nos lo dice en el Curso citando este extracto, "Aun en este mundo
es posible oír sólo esa Voz y ninguna otra. Ello requiere esfuerzo, así como
un gran deseo de aprender. Ésa es la
última lección que yo aprendí, y los Hijos de Dios gozan de la misma igualdad
como alumnos que como Hijos. T-5.II:3:9-11
Observa que Jesús no dice que fuese
"fácil" sino que esto requería esfuerzo, que seria lo mismo que
decir, aplicación, deseo por ello. De la misma manera que un futbolista de
corazón desea sobresalir en su campo, él pone esfuerzo, dedicación en patear la
pelota lo mejor que pueda. Nosotros tenemos que estar dispuestos a mirar
conscientemente. Eso solo lo determina el propósito que se le adjudica a
nuestra experiencia de "vida". Si es la paz de Dios lo que realmente
deseamos, pondremos el tiempo y la dedicación. Si es el placer, si es el mundo,
todavía hay terreno por recorrer. Aun así, ante la Visión del Espíritu Santo,
Cristo, Mente Recta, Sabiduría Interna o como se le quiera llamar, seguimos
siendo amados. No somos culpables de nada. Dios NUNCA nos castigará. En otras
palabras, no puedes perder el amor de Dios, hagas lo que hagas. Solo puedes
experimentar miedo si eliges ir por tu cuenta.
En resumidas cuentas, cuando agarras el
mensaje de Cristo y lo distorsionas, observa que te sientes culpable, sin siquiera
haber hecho nada, solo por el mero hecho de haber "nacido". Eso sería
un indicativo de que sería bueno empezar a cuestionar cualquier enseñanza que
de alguna forma u otra genere culpa o miedo en ti. Observa no obstante, como Un
curso de Milagros te va llevando de la mano al deshacimiento de todo miedo. Eso
es todo lo que tienes que recordar, sobre todo cuando tu mente se encuentra
confundida intentando reconciliar dos mensajes, que aunque aparenta que vienen
del mismo maestro, son diametralmente opuestos.