Como
estudiante del curso de milagros, se que todo esto es una más de las
distracciones que el sistema de pensamiento del ego usa para distraerme de la
verdad y justo también me cuestiono si aún quiero una relación especial más (en
este caso con mi nuevo hijo) que me mantenga distraída y me alargue el tiempo
de regreso a Dios!!! No sé qué hacer !!!! estoy atravesando una nube oscura de
confusión !!Gracias por tu atención !!! Se que tanto él como yo, estamos
experimentando culpa y miedo y comprendo mucho su sentir, pero aunque lo
comprendo, en mi surge miedo al no ser respaldada ( en mi anterior relación mi
personaje llevo mucho trabajo con mi hijo, desde mantenerlo , educarlo,
llevarlo a terapias, etc etc etc )"
Comentario: Empecemos por aquí, cuando dices, "...justo también me
cuestiono si aún quiero una relación especial más (en este caso con mi nuevo
hijo) que me mantenga distraída y me alargue el tiempo de regreso a
Dios!!!"
No existe una relación especial
"mas", porque solo hay UNA SOLA relación especial. Es la relación que
tienes con el ego EN LA MENTE. Siempre y cuando esa sea tu relación, todo el
mundo será una relación especial para ti, aun sin tener hijos, ni pareja, ni
familia.
Por consiguiente, no tienes que
preocuparte por eso de que un hijo es una relación especial "más", y
que por lo tanto retrasaría tu regreso a Casa por así decirlo. De hecho, el
mero hecho de que estás experimentando miedo y preocupación, es un indicativo
de que estás, en este momento, en una relación especial con el ego EN LA MENTE.
Ahora, siendo consciente de ello, vas a utilizar cada una de tus experiencias
como currículo a través el cual vas a elegir el sistema de pensamientos del
Espíritu Santo (perdonar) y restablecer la Relación Santa con Él ¡EN LA MENTE!
En ese sentido, cada escenario te ofrece otra oportunidad para retornar a Casa
más rápidamente.
Habiendo clarificado eso, la situación,
el escenario que se te está presentando, es donde estás poniendo la atención,
creyendo que ahí es donde está el problema y és la razón por la que sufres. Es
por eso que me cuentas todos esos detalles. Pero el problema simplemente radica
en tu identificación con el sistema de pensamiento del ego EN LA MENTE. Eso a
su vez, desencadena una cantidad de significado, interpretaciones y de miedos
fabricados que no te permiten vivir la experiencia presente tal cómo se va
presentando.
Observa como todo tu miedo va
dirigido hacia el futuro, al igual que utilizas tu pasado como referencia, y
eso es lo que genera culpa y preocupación. Y entiendo perfectamente cómo te
sientes, pues no estoy descartando tus sentimientos. Simplemente estoy
recordándote que el problema para tí, radica en donde estás poniendo tu
atención. Y eso tiene que ver, porque sigues identificándote con un
"yo" personal. Ese "yo" es el que busca la relación de
pareja, es el que busca el mundo para "satisfacer" sus
"necesidades". Si de verdad quisieras regresar a Casa soltarías tu
pareja, el deseo por el sexo, solitarias todo este mundo ¡AHORA MISMO! Pero la
verdad es que prefieres este mundo. En ese sentido, es bueno ser honesto y
decir, "deseo el mundo, aun siendo consciente del precio que estoy pagando
por ello. Pero estoy abiert@ y dispuest@ a rendirme completamente al Espíritu
Santo."
Una vez establecida esa
actitud, a raíz de tu, "...pequeña dosis de buena voluntad," T-18.IV
tu guión se va a desenvolver como se tenga que desenvolver, solo que al
cambiarle su propósito se utiliza para beneficio de la Verdad. Por eso es que
no puedo dar ningún tipo de consejo. Pero si te puedo recordar con qué Maestro
mirarlo (Espíritu Santo), y en ese sentido tu experiencia te brinda la
oportunidad PERFECTA para que tú enfoque hacia la verdad sea más consistente.
Por eso el Curso nos recuerda, "Observa cuánta vigilancia has estado
dispuesto a ejercer para proteger a tu ego, y cuán poca para proteger a tu
mente recta." T-4.III.10:3
Ese es en si el regalo que
toda experiencia nos brinda. Apoyarnos a que nuestro enfoque hacia la Verdad
sea mucho más disciplinado. Ese enfoque solo requiere que nuestro deseo por la
paz sea lo más importante. Ahí es donde el momento presente, el Instante Santo
se convierte en nuestro único refugio. Y en medio de cualquier torbellino se
nos recuerda, "El perdón, en cambio, es tranquilo y sosegado, no hace
nada. No ofende ningún aspecto de la realidad ni busca tergiversarla para que
adquiera apariencias que a él le gusten. Simplemente observa, espera y no
busca." W-pII.1.4:1-3
En ese sentido, lo único que
podemos hacer, es rendirnos a la experiencia tal como se desenvuelve. Y confiar
de que la vida sabe en qué dirección dirigirnos. De nuevo, independientemente
de las circunstancias presentes, si creemos que el problema está en el mundo,
estamos poniendo toda la atención en donde el problema no está. El único
problema está en la mente.
Aparte de eso, recuerda siempre que no
estás sola, “Si supieras Quién camina a tu lado por la senda que has escogido,
sería imposible que pudieses experimentar miedo.” T-18.III.3:2 Y que hay un
amor que está guiando tu proceso perfectamente, ”¿qué no ibas a poder aceptar
si supieses que todo cuanto sucede, todo acontecimiento, pasado, presente y por
venir es amorosamente planeado por Aquel cuyo único propósito es tu bien?"
W-135.18:1 En ese sentido, “Todas las cosas obran conjuntamente para el bien
(de la mente). En esto no hay excepciones salvo a juicio del ego."
T-4.V.1:1-2.
Mientras tanto, una vez más,
utilizas cada experiencia para traer tu atención a la mente, y confía ahora en
el proceso que la vida, el amor está desarrollando para tu despertar, para que
la paz se restaure en tu mente hoy y por siempre.