Pregunta: “Hola Nick! sigo practicando el perdón cada día de mi vida (o trato) a veces las emociones sobre todo las que catalogamos negativas son mas fuertes. Lo que me pasa ahora es que hace 6 meses estoy soltera después de 18 años de estar en pareja y creo que la vida me esta dando la oportunidad de estar sola, de aprender que no necesito nada ni nadie para estar plena. Me sucede que siento culpa cuando estoy en mi casa sola, yo disfruto bastante de mi soledad ya que en cuanto puedo voy a mi casa, ahí me siento cómoda, tengo mis cosas, mi compu mis series de tv, etc. pero me critican porque siempre estoy "encerrada" siento que debería salir por ahí pero no me da ganas y me da culpa. Me dicen que me estoy a acostumbrando a estar sola y eso no es bueno. un consejo me vendría genial! gracias Nick! por todo!!!”
Comentario: Donde
quiera que estés en cada momento es exactamente donde tienes que estar, con o
sin pareja. La culpa que sientes simplemente tiene lugar porque te estás
dejando llevar por las interpretaciones de esa experiencia. Si la interpretas
como mala o incorrecta sientes culpa. Si de lo contrario la vez como una
experiencia que está teniendo lugar sin significado intrínseco estás en paz con
tu experiencia. Las personas a tu alrededor que según tú te juzgan, podrían ser
representaciones del juicio, o la duda que tienes sobre ti o con relación a tu
experiencia que ahora se proyecta en lo que aparenta ser “otras” personas
juzgándote o criticándote. Pero no pasa nada. Lo puedes ver como otra
oportunidad para mirar la verdad de lo que realmente eres y por consiguiente
poner en práctica el perdón. De esa manera se pasa por alto las interpretaciones
y restauras la paz en tu mente.
Recientemente una persona me envió un
mensaje por Facebook donde me dijo que como músico y cantautor era una persona
muy mediocre. Al principio me molestó y me sentí herido. Pero al tomar
conciencia me di cuenta qué quizás hay una parte en mi que duda de mi mismo y
esa persona me ofreció el regalo de poder observarlo. Después de hacer mi
trabajo de perdón me di cuenta que eso era un punto de vista que no tiene nada
que ver con mi realidad en Dios. Ese punto de vista no es correcto ni correcto,
de la misma manera que lo que yo piense de mí no es correcto ni incorrecto.
Solo puntos de vista que no tienen nada que ver conmigo como consciencia. Lo
mismo ocurre contigo. Siempre habrán puntos de vista relacionadas con cómo
“deberías” vivir tu vida.
No creas ninguno de esos puntos de vista
y disfruta cada momento tal y como se te presenta en plena confianza que es el
currículo perfecto para ti. Si se supone que tengas pareja se presentará la
situación con el propósito de que continúes tu proceso de perdón. Lo que sí me
gustaría hacer hincapié es que si te escondes en tu cueva para distraerte pueda
que no le estés sacando provecho a tu experiencia para sanar.
Es por eso que digo que es muy fácil ser
“espiritual” y soltero ya que las relaciones nos ofrecen una gran oportunidad
para mirar los obstáculos a la paz. Pero de nuevo, no estoy insinuando que
debas forzar estar en una relación. Simplemente disfruta plenamente de cada
momento que la vida te está presentando para profundizar en el perdón mientras
haces las cosas que disfrutas. Y según sea el momento de continuar la jornada
en la que quizás una relación de pareja te apoye en tu camino hacia el
despertar, la misma se presentará y se utilizará con el propósito que el
Espíritu Santo tiene para ella basada en tu deseo de sanar y recordar que eres
el Ser.
Así que mientras disfrutas de tu
experiencia contigo misma, puedes sacarle gran provecho para profundizar en tu
aperture de consciencia. No insinúo que tienes que dejar las cosas que te
apetecen a un lado, pero sí ser consciente de que este proceso requiere de tu
parte pues de lo contrario te la pasarás como muy bien dices viendo videos,
series de TV, distraída en tu compu y nada de eso te servirá para el despertar de
la consciencia sino que mas bien para que si llega otra pareja repetirás los
mismos patrones generando un circulo vicioso en ti de frustración y desaliento.
Es por eso que se nos recuerda a través
del curso, “El Espíritu Santo se
encuentra en ti en un sentido muy literal. Suya es la Voz que te llama a
retornar a donde estabas antes y a donde estarás de nuevo. Aun en este mundo es
posible oír sólo esa Voz y ninguna otra. Ello requiere esfuerzo, así como un gran deseo de aprender.
Ésa es la última lección que yo aprendí, y los Hijos de Dios gozan de la misma
igualdad como alumnos que como Hijos.”
T-5.II.3:7-11
No te pido que hagas de esto un ritual o
un sacrificio. Desear a Dios tiene que ser un deseo genuino donde disfrutas el
camino. Yo no “medito” a hago nada especial porque “debería”. Lo hago porque lo
deseo. Y el beneficio de la paz y la felicidad que derivo de ello son
suficiente para mantenerme inspirado en el camino hacia la Verdad. Y sigo
haciendo las cosas que como seres humanos hacemos. Aunque muchas de esas cosas
ya no me llaman la atención y por consiguiente se dejan a un lado. Me encanta
el silencio. Y también me gusta compartir. Pero cuando estoy conmigo mismo, me
siento bien y pleno. Y cuando estoy compartiendo también, solo que utilizo cada
experiencia para observar conscientemente.
Así que en tu caso, lo que ocurre es
porque así tiene que ser. Aprovecha tus momentos de quietud, o mejor dicho,
disfruta, tus momentos de quietud en medio de las cosas que también te gustan
hacer. Solo que si esas cosas las hacías para distraerte, según saboreas la
dicha de la paz las dejarás a un lado para profundizar en el goce del silencio.
Y recuerda siempre, el objetivo no es tener o no una pareja sino que no necesitarla. Cuando no existen necesidades ¡eres libre!