En mi propio proceso me gustaría
compartir algo que surgió hoy referente a ese entendimiento. Cuando la mente
está clara, sabe que en todo momento lo que tiene es lo que desea. Cuando la
mente está confusa cree que desea algo diferente de lo que tiene, y como
consecuencia de ese conflicto interno sufre.
Ese sufrimiento se experimenta como un
cuerpo dolor que muy bien puede tomar la forma de sufrimiento psicológico,
culpa, una profunda tristeza, un nudo en el estomago, depresión, etc., y en
función a ese sentimiento la mente continúa fabricando historias hundiéndose
así misma en un océano interminable de culpa, de dolor, de temor, de nuevo, de
sufrimiento.
El perdón todo lo que hace es que acoge todos
esos sentimientos, sin juzgarlos, sabiendo ya de antemano que cualquier
historia que la mente fabrique es falsa. Así es como se van atravesando las
capas de culpa inconsciente que nos llevan a ser conscientes del amor
incondicional que somos.
Lo que hace este proceso tan difícil es
el dolor que se experimenta a nivel psicológico corporal que generalmente nos
lleva a huir para no sentir. Por eso queremos la píldora, la distracción, sea
cual sea. Queremos meditar creyendo que lo hacemos para ser mas espirituales
cuando en realidad lo hacemos para no sentir. Nos la pasamos mas tiempo en el
trabajo, o mirando televisión excesiva, o comer para sentirnos
"mejor" que en Ingles a la comida rápida se le llama "confort
food" (comida de conforte), nos ponemos a hablar con amistades, leer un
libro, etc.
A este momento crucial en la vida de todo
aquel que desea la verdad se le conoce como la noche negra del alma. Yo
prefiero llamarlo la noche negra del ego, pues su muerte se avecina. Su muerte
es la identificación con un "yo". Es perder mi identidad, la que
construí y he estado sosteniendo toda una "vida". Esa identidad esta
sostenida por todas mis creencias. Y por consiguiente, si quiero dejarla a un
lado tengo que soltar todas mis creencias.
Aquí no hay "varitas mágicas",
ni "mantras específicas", ni "práctica o técnicas
especiales". Sólo la voluntad de atravesar esas nubes, de permitir que ese
dolor nos atraviese. ¿Cuanto tiempo? El tiempo que sea necesario. Una vez
escuché al Dr. Kenneth Wapnick decir que tienes que atravesar tu odio antes de
llegar al amor en ti. El curso lo plantea de la siguiente manera,
"Trataremos ahora nuevamente de llegar a la luz en ti, que es donde
realmente se encuentra tu salvación...Recuerda que tienes que atravesar las
nubes antes de poder llegar a la luz." W-pI.70.8:1..5 La Biblia describe
este proceso de atravesar el miedo de la siguiente manera, "Porque
estrecha es la puerta y angosta la senda que lleva a la vida, y pocos son los
que la hallan." [Mateo 7:14]