Friday, April 13, 2018

¿Qué Hacer Con el Conflicto Entre Personas Que Aprecio?

Pregunta: "Hola Nick, soy un seguidor tuyo de hace poco más de un año y siento bastante afinidad por tu forma de ver el mundo. He intentado varias veces hacer un curso de milagros, pero al final siempre acabo dejándolo, porque mi ego me dice que si sigo avanzando, no tendré tiempo para terminarlo por ocupaciones que me van a ir sucediendo. En estos momentos estoy volviendo a comenzarlo. En cualquier caso, la cuestión es que tengo un dilema que se me repite en la vida por lo general, con frecuencia suelo estar envuelto entre el conflicto de una persona y otra, ese conflicto puede ser con algún ser querido o algún amigo, un amigo con otro amigo, etc... y yo me siento bastante mal, tengo miedo de estar entre medio de dos personas que se pelean y a las que al mismo tiempo les aprecio. Me genera una gran ansiedad pasar por esa situación, pues generalmente suelo dar con personas de un carácter fuerte, con ideas rígidas, pues al final una de las 2 personas de ese conflicto se acaba alejando de mi o las dos ¿Como podría sobrellevar esas situaciones que se me repiten con frecuencia? Un fuerte abrazo y gracias de antemano."

Comentario: Dice, "...mi ego me dice que si sigo avanzando, no tendré tiempo para terminarlo por ocupaciones que me van a ir sucediendo."

Aquí observamos el primer error. Un curso de Milagros no es un curso que se "empieza" y se "termina". Si al título Un curso de Milagros sustituyes la palabra curso por proceso, camino. Y sustituyes la palabra Milagros por, deshacimiento, el título se leería <<Un proceso de desasimiento>> o <Un camino de desasimiento>>. ¿Y qué que es lo que se está deshaciendo? !El miedo!

Por lo tanto, hacer, o mejor dicho PRACTICAR el curso implica mirar el miedo para que a raíz de un cambio de mentalidad pueda ser deshecho. Si optas por no PRACTICAR el curso, simplemente vivirás lleno de miedo. Y como el ego se sostiene por el miedo, se alimenta del miedo, ¡claro que te exhorta a que no hagas el curso! Porque deshacer el miedo implica deshacer el ego. ¿Y quien querría aniquilarse?

Por lo tanto, la motivación para hacer Un curso de Milagros, no es ni el entendimiento, ni ninguna meta "espiritual". Es simplemente la paz de Dios. Por eso un curso de Milagros me recuerda, "El conocimiento no es la motivación para aprender este curso. La paz lo es." T-8.I.1:1-2

Hasta que la paz no sea lo más importante para ti, no te sentirás atraído a hacer Un curso de Milagros. Por consiguiente, la pregunta que es importante hacerse es, ¿quiero seguir viviendo con miedo o deseo vivir en paz?

Cuando desear la paz sea lo más importante, no habrá obstáculo que se interponga ante estudiar el curso.

Y que conste, cuando hablo de estudiar el curso, no estoy insinuando que el curso es el único camino. Lo que quiero decir es, que harás lo que sea necesario, a raíz del camino que sea necesario, para el cumplimiento de ese deseo. Para algunas personas es Un curso de Milagros. Para otras sería otro camino.

Vamos ahora a la segunda parte de tu inquietud. Dices, "...me siento bastante mal, tengo miedo de estar entre medio de dos personas que se pelean y a las que al mismo tiempo les aprecio."

Al no estar familiarizado con el contenido de Un curso de Milagros, no sé si la contestación que voy a compartir hará sentido para ti. Sin embargo, voy a plantear la respuesta basada en mi práctica y entendimiento de la teoría puramente no dual del curso.

Sólo existe una mente, y dentro de esa mente aparenta haber un pensamiento al cual le llamo "yo". Ese pensamiento se le conoce como el soñador del sueño. Ese soñador del sueño, que de por sí se percibe separado de la mente, proyecta a su vez un mundo de separación. Aquí es donde voy a utilizar la analogía del sueño como lo conocemos a este nivel, así se te será más fácil relacionarte.

Cuando por la noche te acuestas a dormir, sólo existes tú en la cama. Sin embargo, cuando te pones a soñar, se te olvida que lo único que existe eres tú en la cama. Y ahora crees que formas parte de un sueño donde aparentan haber "muchos". Y es ahí donde surge todo el conflicto y toda la confusión. En tu caso, aparenta que hay un tú (pensamiento en la mente) que se encuentra interactuando con dos personas más (pensaientos provenientes de la misma mente). Y tu pregunta va dirigida hacia que hacer, asumiendo que "existen" dos personas más, "aparte de ti". Y quieres una respuesta a como lidiar con ello. Toda tu atención va dirigida hacia donde el problema ¡no está! Hacia el sueño. El ¡único problema!, es que se te olvida que tú eres un pensamiento proyectado de la mente que te sueña a ti.

Y por eso la única solución a todo problema es descansar en este instante, retirando la atención fija que le prestas a lo que aparenta estar teniendo lugar en tu alrededor. Esto es algo que las palabras no pueden explicar, ya que las mismas van dirigidas hacia la parte de la mente que se percibe separada. Esto me recuerda un extracto que recién me enviaron por WhatsApp del Manual para el Maestro que dice, "¿Debe evitar, entonces, el maestro de Dios el uso de las palabras cuando enseña? ¡Por supuesto que no! Son muchos a los que aún es necesario acercarse por medio de las palabras, ya que todavía son incapaces de oír en silencio. No obstante, el maestro de Dios debe aprender a utilizar las palabras de otra manera. Poco a poco aprenderá a dejar que las palabras le sean inspiradas, a medida que deje de decidir por sí mismo lo que tiene que decir. Este proceso no es más que un caso especial de la lección del libro de ejercicios que reza: "Me haré a un lado y dejaré que Él me muestre el camino". El maestro de Dios acepta las palabras que se le ofrecen y las expresa tal como las recibe. No controla lo que dice. Simplemente escucha, oye y habla." M-21.4:1-9

Lo único que aparenta estar ocurriendo en tu experiencia, es que estás pasando por alto el hecho de que ésta es una experiencia soñada, y de nuevo, al mantener la atención fija dentro del sueño, se está pasando por alto completamente la realidad en Dios.

No hay respuesta a tu pregunta. Solo que si tu deseo es la paz de Dios, o si quieres seguir haciendo el mundo real para luego intentar "resolver" tus problemas aquí. Cuando desees la paz de Dios sobre todas las cosas, puede que entonces te sientas inclinado a estudiar el curso, o el camino que la vida te muestre.

Todos los "problemas" se resuelven de la misma manera y con el mismo enfoque. Por eso el curso nos recuerda;

"Es fácil entender las razones por las que no le pides al Espíritu Santo que resuelva todos tus problemas por ti. Para Él no es más difícil resolver unos que otros. Todos los problemas son iguales para Él, puesto que cada uno se resuelve de la misma manera y con el mismo enfoque (el verdadero perdón). Los aspectos que necesitan solución no cambian, sea cual sea la forma que el problema parezca adoptar (problemas con amistades, dinero, salud, negocio, familia, gobierno, etc.). Un problema puede manifestarse de muchas maneras, y lo hará mientras el problema persista (el problema es que me percibo como un cuerpo separado de Dios). De nada sirve intentar resolverlo de una manera especial. Se presentará una y otra vez hasta que haya sido resuelto definitivamente y ya no vuelva a surgir en ninguna forma (cuando seas consciente de que todo esto es un sueño). Sólo entonces te habrás liberado de él." T-26.II.1:1-8

Y volviendo a tu pregunta final; "¿Como podría sobrellevar esas situaciones que se me repiten con frecuencia?" ¡Perdonando!

Pero eso no puede tener lugar si no lo practicas. ¿Y que hace el perdón? ¿Cómo se practica? "El perdón, en cambio, es tranquilo y sosegado, y no hace nada. No ofende ningún aspecto de la realidad ni busca tergiversarla para que adquiera apariencias que a él le gusten. SIMPLEMENTE OBSERVA, ESPERA Y NO JUZGA." W-pII.1.4:1-3