Tuesday, June 26, 2018

No Luches Contra Ti Mismo

"La vida, Nisargadatta Maharaj mencionaba en repetidas ocasiones, es como un sueño, como un juego de escenario donde los distintos actores juegan sus respectivos roles sin ser realmente desprevenidos de su verdadera identidad. El actor experto que desempeña el papel de un rey nunca es por un momento inconsciente del hecho de que él es realmente en la vida un mendigo.

En el día a día, lo que tenemos que hacer es vivir nuestros roles de forma natural, y aceptar lo que la vida trae en su curso de acuerdo con el gran diseño de la totalidad del funcionamiento fenomenal. Todo lo que uno se espera que haga – y todo lo que uno puede hacer – es vivir de acuerdo a la naturaleza inherente de uno, de acuerdo con la programación en el aparato psicosomático, y dejar que el profundo entendimiento de nuestra verdadera naturaleza se encargue de los cambios que considere necesarios, sin ningún sentido de voluntad personal.

Cualquier intento de controlar nuestra naturaleza inherente sólo puede resultar en la supresión y sus consecuencias adversas." -Ramesh Balsekar

Comentario: Cuando habla de nuestra "naturaleza inherente", no está hablando de nuestra realidad en Dios. Lo que esto quiere decir, y es muy importante que prestemos atención, es que nuestro personaje viene ya con un condicionamiento biológico y psicológico (naturaleza inherente), y en función a ese condicionamiento es que reacciona a cada una de sus experiencias.

Luchar contra ese condicionamiento no sólo es inútil sino que a su vez extremadamente doloroso. Es por eso que un curso de Milagros me recuerda; "...si experimentas gran resistencia y ves que tu resolución flaquea, es que todavía no estás listo. No luches contra ti mismo." T-30.I.1:6-7

Lo que se nos pide, no es que actuemos en función a ese condicionamiento -aunque si terminamos actuando es simplemente lo que ha de ocurrir- sino que cualquier condicionamiento que tenga lugar, que por lo menos tomemos conciencia de que todo esto es un sueño y aprovechemos esta oportunidad para poner en práctica perdón. El perdón es simplemente una rendición total a lo que es. O como el Curso mismo lo plantea,"El perdón, en cambio, es tranquilo y sosegado, y no hace nada. No ofende ningún aspecto de la realidad ni busca tergiversarla para que adquiera apariencias que a él le gusten. Simplemente observa, espera y no juzga," W-pII.1.4:1-3

Este proceso, aunque es simple, no es fácil debido al apego tan profundo que existe a nuestra identidad como personaje separado. Otra manera de decirlo, el apego profundo que existe a nuestro papel de actor, que inconscientemente tenemos miedo a soltar. No obstante, según esa rendición total a lo-que-es continúa, se van deshaciendo los obstáculos al amor y se empieza poco a poco a dejar de creerse uno ese papel.

Esto es algo que, aunque puede ser explicado, no puede ser entendido. Es una experiencia que simplemente tienen lugar según se van deshaciendo las capas de culpa inconsciente generadas por la gran mentira de creernos que somos el papel que estamos jugando.

Así es como el sufrimiento desaparece, la mente se va aquietando, y la paz es finalmente restaurada. Para efectos de una revisión de lo que acabo de compartir, el mensaje intrínseco es, no luchar ni con nuestros deseos ni con nuestras tendencias. Sino que aprender a observarlas como un ocurrir que está teniendo lugar, y que a su vez no tienen nada que ver con nosotros. Así se desarrolla una comprensión y una compasión profunda con el personaje, el cual no importa lo que tenga lugar en su experiencia, es completamente inocente por la naturaleza de lo que Es.