Thursday, November 29, 2018

¿Es La Fe Otro Engaño de la Ilusión?

Pregunta: "Hola Nick ¿como estas? Tengo una consulta. ¿En la fe hay un yo queriendo algo no?, o sea la Fe es otro engaño de la ilusión?

Comentario: La fe es un concepto que sirve de gran apoyo cuando emprendemos este camino del despertar de la conciencia. Sin embargo, la fe, como la aceptación, la entrega, etc., son solo conceptos que implican que hay un "yo" involucrado. En ese sentido, cualquier acción, decisión, o intención, el sistema de pensamientos del ego, en otras palabras, la idea de una identidad personal se sigue sosteniendo.

Voy a compartir este extracto de el libro de Ramesh Balsekar que clarifica muy bien tu pregunta:

------Extracto------
"Uno de los discípulos de Lao Tzu fue a verle una mañana con los ojos resplandecientes y la cara radiante. Sentía que lo había conseguido y le dijo: <<Maestro, lo he alcanzado.>> Y Lao Tzu con gran compasión puso sus manos en sus hombros y le dijo: <<Hijo, no has alcanzado nada.>> El discípulo se marchó. Al cabo de algún tiempo volvió con una gran calma y compostura, y dijo a Lao Tzu: <<Maestro, ha sucedido.>> Lao Tzu, le miró a los ojos, le abrazó y le dijo: <<Ahora cuéntame ¿qué ha sucedido?>> El discípulo respondió: <<Acepté su palabra de que no había sucedido nada, pero también supe que no podía hacer más esfuerzo. Así que dejé de pensar en la iluminación, abandoné todo esfuerzo para alcanzar la iluminación y seguí con mi vida normal. Entonces, de pronto me di cuenta de que no había nada que alcanzar. ¡Siempre había estado allí!>>.



Había surgido el entendimiento de que no hay individuo que quiera nada. Ese estado ya existe. El estado último, antes de que pueda suceder, es la ausencia del "yo" deseando que suceda algo."
------Final del Extracto------

Partiendo de esta nueva comprensión, la pregunta sería, ¿tener fe en qué? Desde que me he ido percatando de ese entendimiento, mi vida es una rendición total a lo que es. Sí utilizo el concepto de la fe, en mi caso sería, tengo fe en este momento presente de que es tal y como tiene que ser. En ese sentido, no hay una sensación de un "yo” involucrado. Simplemente es lo que es.

Cuando uno está buscando, esa idea del buscador, es el que tiene fe en que una experiencia extraordinaria tenga lugar, el que tiene fe en que las cosas van a cambiar para que se adhieran a como el desea que fuesen, el que tiene fe en que algún día se iluminará, o lo que sea. Pero cuando la búsqueda termina, ya el concepto de fe se deshace.

De nuevo, una persona que está comenzando con el camino del desasimiento de el ego, de el desasimiento del concepto de un "yo", obviamente los términos y conceptos como la "fe" son parte de su proceso y hacen perfecto sentido. Pero una vez que empezamos a entrar en contacto con lo que es la no dualidad se comienza a dejar todos los conceptos a un lado, inclusive el concepto “Dios”, no porque allá algo “incorrecto” con ese concepto, sino porque limita lo que Dios es cuando se le intenta conceptualizar.

Por eso es que el Tao Te King dice (he añadido lo que está en paréntesis):

“El Tao que puede ser expresado no es el verdadero Tao. (si se puede hablar de Él o conceptualizar, no es la Verdad.)

El nombre que se le puede dar no es su verdadero nombre. (Dios, Jehová, Alá, Krishna, Yahweh, Elohim, Padre, Esencia, etc. Todo nombre es un concepto, y por consiguiente niega la Verdad, niega lo que Es.)

Sin nombre (sin conceptos) es el principio del universo; y con nombre (Dios, Jehová, Alá, Krishna, Yahweh, Elohim, Padre, Esencia, etc.) es la madre de todas las cosas (la creencia en la separación, la creencia en las ilusiones).

Desde el no-ser (desde lo que Es); comprendemos su esencia y desde el ser (la experiencia física), sólo vemos su apariencia (la fragmentación, el “tú” “separado” del “yo” y así sucesivamente).

Ambas cosas, ser y no-ser, tienen el mismo Origen (lo que Es), aunque distinto nombre (Dios, Jehová, Alá, Krishna, Yahweh, Elohim, Padre, Esencia, etc.).

Su identidad es el misterio (libre de conceptos). Y en este misterio se halla la puerta de toda maravilla.”  (lo que Es libre de todo concepto).

Volviendo al tema de la fe, en mi caso, el concepto fe ha sido reemplazado por confianza, que es también otro concepto, solo que como estamos comunicándonos con palabras (conceptos), esa es la mejor descripción que puedo utilizar.

Me podría quedar en silencio, que paradójicamente es lo mas cercano a lo que la confianza es, a lo que la fe es, a lo que el amor es, a lo que la paz es. Por eso el Curso me recuerda, “El milagro (la paz, la comprensión, libre de conceptos) llega silenciosamente a la mente que se detiene por un instante y se sumerge en la quietud." T-28.I.11:1

Es ahí, hacia el silencio, a donde apuntan todas las palabras (conceptos) que el Curso al igual que toda enseñanza no dual apuntan. Volviendo a mi experiencia, vivo cada momento en plena confianza (fe, silencio, aceptación) de que todo es como tiene que ser. Nada tiene que ser diferente a cómo es. Todo es aceptado, todo es acogido.

Más como soy consciente de que no soy el "hacedor", reconozco que no soy "yo" quien vive en confianza. No soy “yo” quien vive en aceptación. No soy "yo" quien vive en fe. Confianza es lo que se vive a través de "mi". Aceptación es lo que se vive a través de “mi”. Fe es lo que se vive a través de "mi". ¿Por qué? Porque esa es la Voluntad de Dios. ¿Y cómo sé que es la Voluntad de Dios? Porque es lo que está ocurriendo.

Así que cuando hablo es porque es lo que tiene que ocurrir. Cuando no hablo es porque es lo que tiene que ocurrir. Haga lo que haga, diga lo que diga, si está ocurriendo, es porque es lo que tiene que ocurrir. Eso es lo que consideró como fe, eso es lo que considero como confianza. La Voluntad de Dios deja ya de ser un “misterio”. Es simplemente lo que sea que esté teniendo lugar en el momento presente. ¡Es así de simple! Es así de ¡obvio!.

Si no hay resistencia alguna a la experiencia presente, si hay aceptación a la experiencia presente (si hay fe, si hay confianza), no hay sufrimiento. Solo hay paz.

Según esa comprensión se va asentando, la vida se hace más simple, y el perdón nos conduce a esa comprensión. Por eso es que el perdón no “analiza”, no “justifica”, <<Simplemente observa, espera y no juzga.>> " W-pII.1.4:3 En ese sentido me considero un hombre de fe. No porque tenga fe en algo, o en alguien. Sino porque fe es lo que soy. Confianza es lo que soy. Confianza y amor son sinónimos ya que uno no puede existir sin el otro. Entonces, no soy fe, soy amor. Que curiosos como un juego de palabras que aparentan ser “diferentes” al final significan lo mismo.