Comentario: La fe
es un concepto que sirve de gran apoyo cuando emprendemos este camino del
despertar de la conciencia. Sin embargo, la fe, como la aceptación, la entrega,
etc., son solo conceptos que implican que hay un "yo" involucrado. En
ese sentido, cualquier acción, decisión, o intención, el sistema de
pensamientos del ego, en otras palabras, la idea de una identidad personal se
sigue sosteniendo.
Voy a compartir
este extracto de el libro de Ramesh Balsekar que clarifica muy bien tu
pregunta:
------Extracto------
"Uno de los
discípulos de Lao Tzu fue a verle una mañana con los ojos resplandecientes y la
cara radiante. Sentía que lo había conseguido y le dijo: <<Maestro, lo he
alcanzado.>> Y Lao Tzu con gran compasión puso sus manos en sus hombros y
le dijo: <<Hijo, no has alcanzado nada.>> El discípulo se marchó.
Al cabo de algún tiempo volvió con una gran calma y compostura, y dijo a Lao
Tzu: <<Maestro, ha sucedido.>> Lao Tzu, le miró a los ojos, le
abrazó y le dijo: <<Ahora cuéntame ¿qué ha sucedido?>> El discípulo
respondió: <<Acepté su palabra de que no había sucedido nada, pero
también supe que no podía hacer más esfuerzo. Así que dejé de pensar en la
iluminación, abandoné todo esfuerzo para alcanzar la iluminación y seguí con mi
vida normal. Entonces, de pronto me di cuenta de que no había nada que
alcanzar. ¡Siempre había estado allí!>>.
Había surgido el
entendimiento de que no hay individuo que quiera nada. Ese estado ya existe. El
estado último, antes de que pueda suceder, es la ausencia del "yo"
deseando que suceda algo."
------Final del
Extracto------
Partiendo de esta
nueva comprensión, la pregunta sería, ¿tener fe en qué? Desde que me he ido percatando
de ese entendimiento, mi vida es una rendición total a lo que es. Sí utilizo el
concepto de la fe, en mi caso sería, tengo fe en este momento presente de que
es tal y como tiene que ser. En ese sentido, no hay una sensación de un
"yo” involucrado. Simplemente es lo que es.
Cuando uno está
buscando, esa idea del buscador, es el que tiene fe en que una experiencia
extraordinaria tenga lugar, el que tiene fe en que las cosas van a cambiar para
que se adhieran a como el desea que fuesen, el que tiene fe en que algún día se
iluminará, o lo que sea. Pero cuando la búsqueda termina, ya el concepto de fe se
deshace.
De nuevo, una
persona que está comenzando con el camino del desasimiento de el ego, de el desasimiento
del concepto de un "yo", obviamente los términos y conceptos como la
"fe" son parte de su proceso y hacen perfecto sentido. Pero una vez
que empezamos a entrar en contacto con lo que es la no dualidad se comienza a
dejar todos los conceptos a un lado, inclusive el concepto “Dios”, no porque
allá algo “incorrecto” con ese concepto, sino porque limita lo que Dios es cuando
se le intenta conceptualizar.
Por eso es que el
Tao Te King dice (he añadido lo que está en paréntesis):
“El Tao que puede
ser expresado no es el verdadero Tao. (si se puede hablar de Él o
conceptualizar, no es la Verdad.)
El nombre que se
le puede dar no es su verdadero nombre. (Dios, Jehová, Alá, Krishna, Yahweh, Elohim,
Padre, Esencia, etc. Todo nombre es un concepto, y por consiguiente niega la Verdad,
niega lo que Es.)
Sin nombre (sin
conceptos) es el principio del universo; y con nombre (Dios, Jehová, Alá,
Krishna, Yahweh, Elohim, Padre, Esencia, etc.) es la madre de todas las cosas (la
creencia en la separación, la creencia en las ilusiones).
Desde el no-ser (desde
lo que Es); comprendemos su esencia y desde el ser (la experiencia física),
sólo vemos su apariencia (la fragmentación, el “tú” “separado” del “yo” y así
sucesivamente).
Ambas cosas, ser
y no-ser, tienen el mismo Origen (lo que Es), aunque distinto nombre (Dios, Jehová,
Alá, Krishna, Yahweh, Elohim, Padre, Esencia, etc.).
Su identidad es
el misterio (libre de conceptos). Y en este misterio se halla la puerta de toda
maravilla.” (lo que Es libre de todo
concepto).
Volviendo al tema
de la fe, en mi caso, el concepto fe ha sido reemplazado por confianza, que es también
otro concepto, solo que como estamos comunicándonos con palabras (conceptos),
esa es la mejor descripción que puedo utilizar.
Me podría quedar
en silencio, que paradójicamente es lo mas cercano a lo que la confianza es, a
lo que la fe es, a lo que el amor es, a lo que la paz es. Por eso el Curso me
recuerda, “El milagro (la paz, la comprensión, libre de conceptos) llega
silenciosamente a la mente que se detiene por un instante y se sumerge en la
quietud." T-28.I.11:1
Es ahí, hacia el
silencio, a donde apuntan todas las palabras (conceptos) que el Curso al igual
que toda enseñanza no dual apuntan. Volviendo a mi experiencia, vivo cada
momento en plena confianza (fe, silencio, aceptación) de que todo es como tiene
que ser. Nada tiene que ser diferente a cómo es. Todo es aceptado, todo es
acogido.
Más como soy
consciente de que no soy el "hacedor", reconozco que no soy
"yo" quien vive en confianza. No soy “yo” quien vive en aceptación. No
soy "yo" quien vive en fe. Confianza es lo que se vive a través de
"mi". Aceptación es lo que se vive a través de “mi”. Fe es lo que se
vive a través de "mi". ¿Por qué? Porque esa es la Voluntad de Dios. ¿Y
cómo sé que es la Voluntad de Dios? Porque es lo que está ocurriendo.
Así que cuando
hablo es porque es lo que tiene que ocurrir. Cuando no hablo es porque es lo
que tiene que ocurrir. Haga lo que haga, diga lo que diga, si está ocurriendo,
es porque es lo que tiene que ocurrir. Eso es lo que consideró como fe, eso es
lo que considero como confianza. La Voluntad de Dios deja ya de ser un “misterio”.
Es simplemente lo que sea que esté teniendo lugar en el momento presente. ¡Es así
de simple! Es así de ¡obvio!.
Si no hay
resistencia alguna a la experiencia presente, si hay aceptación a la experiencia
presente (si hay fe, si hay confianza), no hay sufrimiento. Solo hay paz.
Según esa comprensión
se va asentando, la vida se hace más simple, y el perdón nos conduce a esa
comprensión. Por eso es que el perdón no “analiza”, no “justifica”, <<Simplemente observa, espera y no juzga.>> " W-pII.1.4:3 En ese sentido me considero un hombre
de fe. No porque tenga fe en algo, o en alguien. Sino porque fe es lo que soy.
Confianza es lo que soy. Confianza y amor son sinónimos ya que uno no puede existir
sin el otro. Entonces, no soy fe, soy amor. Que curiosos como un juego de
palabras que aparentan ser “diferentes” al final significan lo mismo.