Saturday, June 12, 2021

Este Instante Es Todo Lo Que Es - Nick Arandes

 

Este instante es todo lo que es; sin sentido, sin significado, sin realidad palpable o imaginada. Es el vacío que a su vez es la Totalidad, es el Todo y la nada simultáneamente. Es lo que no puede ser descrito, percibido, ni imaginado. Incomprensible para el intelecto dado que el intelecto es una fabricación mental para sostener un pensamiento de aparente separacion, simplemente Es.

 

La memoria es lo que aparentemente se fabrica para darle sentido a este instante, atribuyéndole características que puedan ser descritas o percibidas, haciendo de este instante una aparente distracción al estado de Ser, que es todo lo que este instante Es. Y decir “éste instante” tampoco tiene sentido porque no existe un instante, dado que no hay “otros” “instantes”. Pero es la limitación del lenguaje.

 

Volviendo al tema de la memoria, sin memoria, lo que hay es lo que Es. La memoria dice, “cuerpo”, “forma”, “pasado”, “imágenes”, “significados”, y es así como se construye una historia onírica, que hace que este instante sea “algo”, cuando la realidad es, este instante simplemente Es.

 

Por ejemplo, la pregunta, “quién soy yo.” Esa pregunta solo surge cuando la memoria dice, “soy algo”. Y ahora dice, “ese algo tiene un nombre”. Y como ahora creo ser ese algo, ahora digo, “ese es mi nombre, tengo un pasado”, que aunque en este instante es solo una historia pensada, ese pasado se le adhiere a “yo soy este algo (un cuerpo), este es mi nombre, yo siento esto, estas son mis posesiones, estos son mis pensamientos, yo estoy viendo esto o aquello, yo estoy escuchando estoy o aquello…”, y la mente se pierde en esa memoria, pasando por alto que este instante simplemente Es, ¡y nada más!

 

Sin historia, es decir, sin un pensamiento fabricado que tome la apariencia de una historia “pasada” la pregunta quién soy yo no podría ser formulada. Pues ¿“quién” o “qué” la formularia? Entonces lo que hay es Presencia; el estado natural en el que se descansa. Ese estado, aunque es un descanso, una dicha, es a la que se le teme. No porque sea “temerosa”, sino porque es la “muerte” de este “yo psicológico” con el que la mente se ha identificado. Es la disolución de toda memoria. Ese temor a la “muerte” (desidentificación con este yo) es la razón por la cual se continúan fabricando pensamientos que toman la apariencia de memorias, hasta que ese miedo se desvanezca y la memoria deja de ser distracción.

 

Entonces, esta experiencia de “vida” se observa como un acontecer, no como algo que me está ocurriendo a “mi”, sino como algo que aparentemente “ocurre”. Ahí se descansa hasta que llega el momento de que no haya necesidad de que la mente fabrique memorias para sostener este aparente montaje y el sueño de separación se desvanece. Y lo que queda es lo que Es, lo que siempre ha sido, y lo que siempre será, Ser.

 

La pregunta que surge es, ¿y como entonces vivo mi vida? Aunque la respuesta es muy simple, primero hay que tomar en consideración quién hace esa pregunta. Esa pregunta surge de una memoria que dice, “soy un cuerpo, existo como individuo separado,…” al igual que trae consigo todas las memorias aprendidas para adherírselas a este “yo” que creo ser, una vez más, pasando por alto que lo único que hay es lo que Es, Ser.

 

Tomando esto en consideración, la respuesta a la pregunta es muy simple, ese “yo” aparente, vive la vida tal y como siempre se ha vivido, sólo que al la mente tomar la posición de espectador y no protagonista, la vida se vive en paz, libre de sufrimiento. Se “vive” como un acontecer que no significa nada, que no tiene nada que ver con la Realidad. Simplemente es un aparente ocurrir, tal y como en este aparente instante se escriben estas palabras.

 

Esto es solo un aparente ocurrir, que ni se le da importancia ni se cuestiona, simplemente es lo que aparenta estar teniendo lugar en este aparente montaje de la obra teatral titulada “yo”.