Pregunta: “Buenos días Nick! Antes que nada quiero darte las gracias por la conferencia de este sábado en GDL, fue muy clarificador y grato escucharte. Tengo tan solo 4 meses practicando las lecciones, estoy confundida en tantas cosas. Te contare llevo años en cursos, retiros, libros, vídeos, etc... Tratando de encontrar en ellos ese equilibrio en mi, me sucede algo que antes me inquietaba cantidad, pasa que percibo, siento y veo algo más allá de esta "realidad" por así llamarlo, hace 6 años atrás me daba tanto miedo que yo oraba y pedía a Dios respuestas a lo que esto es, puedo decirte que Un Curso de Milagros ha sido esa respuesta a tanto que estoy comprendiendo o quizás recordando.
En cualquier instante en que baste ser consciente de ello
estoy en esa frecuencia vibratoria que en verdad es hermosa, pero a la vez la
siento dividida del mundo terrenal, no sé que tanto esto me distrae, ha llegado
a pasar ahora con el libro que me llega el mensaje ábrelo en tal página y está
justo la respuesta a lo que en ese momento estoy preguntándome y solo brotan
lágrimas, la energía que llego a sentir en mis manos a veces yo le digo que es
de otro planeta, las luces que se presentan, el movimiento de esa energía es
divino pero a la vez me causa algo de conflicto, antes le imploraba a Dios que
me dijera el por qué de esto, si tenía que hacer algo con ello....
Ahora estoy tranquila en ese sentido pues lo veo como algo
que simplemente percibo, pero me llego a confundir, justo ahora estoy leyendo
sobre "EL ERROR Y EL EGO", como se puede percibir con amor? Si es que
no lo estoy haciendo. Dice "La conciencia ha sido perfectamente
identificada como perteneciente al ámbito del ego". Cómo hacer para
conocerme como realmente soy y no como deseo ser(ego)?
Tantas veces he ocultado esto por no ser
"diferente" pero en realidad me han sucedido momentos hermosos y
reveladores, pero a la vez es una "lucha" interna, por pertenecer,
por unir ambas vibraciones, por decirme que tengo la vida "perfecta",
la familia ideal, la casa, estoy agradecida por ello pero aun así siento un
vacío y la culpa inconsciente por sentirlo. Gracias de nuevo! Espero poder
asistir al retiro de silencio y fue un placer escucharte! Un abrazo!”
Comentario: Cuando la
mente empieza a ser consciente de que es consciente se experimentan momentos de
apertura y comprensión. No queremos caer en la trampa de identificarlos con
“energías” o “destellos de luces” o de ningún tipo de experiencia “especial”,
no porque sea ni “correcto” ni “incorrecto” sino que porque ahora el sistema de
pensamientos del ego utiliza esas experiencias como algún tipo de “referencia”
la cual queremos ahora que se repita para asegurarnos de estar haciendo el
trabajo “bien”, una vez más, pasando por alto la experiencia que tenemos en
cada momento y en cada instante de ese amor que somos.
Lo que ocurre es que como hemos estado
habitualmente acostumbrados a vivir con una mentalidad dormida por así decirlo,
percibiendo desde una perspectiva errada, concreta, creyendo que nuestros
sentidos muestran lo que es real, solido, creyendo que esa perspectiva es la
correcta, en cierta manera eso se puede experimentar como un conflicto
desconcertante, como una crisis de identidad hasta que aprendemos a ver esa
apertura de conciencia como algo muy natural. Entonces empezamos a aceptar
todas y cada una de nuestras experiencias sin juzgarlas, sin interpretarlas.
Empieza ahora uno a vivir su vida “normal”, solo que siendo consciente de su
realidad como mente. Y aunque tiene las mismas experiencias que experimenta un
cuerpo, sólo que de nuevo, nada de lo que se experimenta en el diario vivir se
convierte en distracción.
El cuerpo se enferma y luego se cura o
no. Los deseos físicos pueden estar ahí y a veces no. En momentos el personaje
se encuentra reaccionando a cosas sólo que al ser consciente la intensidad se
reduce substancialmente de la misma manera que en algunos casos pueda que ya no
haya reacción alguna. Las emociones salen a la superficie sólo que se aceptan
sin juzgarlas por lo que ahora se convierten en nubes pasajeras, y así
sucesivamente. Como podemos ver, la experiencia humana continúa pero se vive en
paz y sin sufrimiento, en completa aceptación de lo que Eres debido a esta apertura
de conciencia. Y a nivel sicológico la mente puede ver el sueño y tener
experiencias muy “descolocantes” por así decirlo porque se va derrumbando todo
concepto que tiene sobre lo que somos, sobre lo que el mundo es, sobre todo.
Algunas personas no obstante pueden experimentar un cambio de consciencia sin
tener que pasar por procesos desconcertantes mientras que otras pasan por un
periodo de crisis o depresión, que es a lo que se le conoce como la noche negra
del “alma”. En realidad es la noche negra del ego porque el Espíritu es dicha
pura. Solo el ego es el que se cree ser algo separado de la verdad y según se
va deshaciendo (muriendo), es por eso que experimentas la “noche negra.”
Ahora, para ir directamente a tu
pregunta, “¿cómo se puede
percibir con amor, cómo hacer para conocerme como realmente soy y no como deseo
ser(ego)?” Muy simple. Deja a un lado todas
tus interpretaciones sobre cada una de tus experiencias y estás percibiendo con
amor. Lo que hace de esta práctica que es tan simple algo tan confuso es que
tenemos conceptos de lo que el amor es y de cómo se debería sentir ese amor.
Tenemos conceptos de lo que el Ser es. Sin embargo, ¿puedes confiar de que
siempre estás en el amor, independientemente de todos los pensamientos que
ahora mismo y en cada momento estén surgiendo en tu mente al igual que las
sensaciones y experiencia que estén teniendo lugar en tu entorno?
Si no juzgas ninguno de tus pensamientos,
ninguna de tus sensaciones o experiencias, y ninguno de los acontecimientos que
estén teniendo lugar en tu vida como “malos” o “buenos”, “correctos” o
“incorrectos”, “deseados” o “no deseados”, etc., estás percibiendo con amor. Y
por consiguiente es lo mas cercanamente posible al reconocimiento de lo que
realmente Eres. Dije lo mas cercanamente posible debido a que a este nivel
físico no puedes reconocerte como Ser. Pero si puedes experimentar una
mentalidad que es mas en semejanza a la de tu Ser, y es una mente en paz.
Habiendo dicho eso, observa la trampa por
la cual aparentas no tener acceso a la experiencia de esa paz. Tu misma dices, “…pero a la vez es una
"lucha" interna, por pertenecer, por unir ambas vibraciones, por
decirme que tengo la vida "perfecta", la familia ideal, la casa,
estoy agradecida por ello pero aun así siento un vacío…”
Intentar unir ambas “vibraciones” como tu
dices es imposible, no porque las dos sean apuestas, sino que porque una es
real y la otra es ilusión. Por eso el curso nos recuerda; “Lo opuesto al amor es el miedo, pero
aquello que todo lo abarca no puede tener opuestos.” T-In.1:8 Como ves, lo opuesto al amor es el miedo. Sin embargo,
como el amor es lo único que existe (todo lo abarca) no puede tener opuestos.
Otra manera de decirlo es, el amor es lo único que hay y por ende el miedo no
existe.
Tu experiencia como Ser, como Dios es
Real. Tu experiencia como ser humano es ilusoria. Entonces cuando dices que
tienes la vida "perfecta", la familia ideal, la casa, y que estás
agradecida por ello, todo lo que estás haciendo es idolatrando tus ilusiones.
Eso te mantiene distraída de tu Ser. Entonces cuando sientes esos momentos de
confusión, es porque por un lado deseas a Dios (lo único que te hace sentir
plena) pero todavía deseas tus ilusiones (la vida "perfecta", la
familia ideal, la casa,…) por lo que sientes un vacío.
Y cuando dices, “siento un vacío y la culpa inconsciente por sentirlo…,” es solo una evaluación. Es la misma culpa inconsciente que primero
sientes el vacío por aferrarte a las ilusiones. Ahora sientes culpa por sentir
el vacío cuando el vacío lo siente por elegir el sistema de pensamientos del
ego. Es un callejón sin salida. Por eso es que el curso no te pide que evalúes
ninguna de tus experiencias sino que mas bien te rindas a cada experiencia sin
juicio, sin evaluaciones, y por consiguiente experimentas esa paz.
Estás teniendo esas experiencias de
apertura de conciencia pero el miedo inconsciente a soltar tu identidad como
ser humano, de soltar la vida “perfecta”, la familia, la casa, etc. (las
ilusiones, lo que no es rea), es la razón por la que experimentas el conflicto.
Es la razón por lo cual pierdes tu paz. Pues recuerda qué despertar del sueño
es el equivalente a soltar esa vida “perfecta”, esa familia, esa casa, y todo
aquello por lo cual dices que te sientes tan agradecida. Pero nada de eso en
realidad existe. Lo único que existe es tu realidad en Dios.
Sin embargo no tienes que tener miedo por
creer “perder” a tu familia o tu casa o tu vida “perfecta”, que por cierto no
son “tuyas”. Sino que más bien, según continúas experimentando esa apertura de
conciencia, tu percepción del mundo va a ir gradualmente cambiando y podrás
reconocerte en tu familia al igual que en todo. La sensación de separación se
va desvaneciendo y empiezas a incluir todas y cada una de tus experiencias como
siendo parte de lo mismo, parte de ti. El miedo se va deshaciendo por lo que el
amor continúa acaparando tu mente.
El curso muy amorosamente lo plante de la
siguiente manera: “No temas que se te
vaya a elevar y a arrojar abruptamente a la realidad. El tiempo es benévolo, y
si lo usas en beneficio de la realidad, se ajustará al ritmo de tu transición.
Lo único que es urgente es desencajar a tu mente de la posición fija que ha
adoptado aquí. Ello no te dejará desamparado ni desprovisto de un marco de
referencia.” T-16.VI.8:1-4
Como ves, no se dejara en un “limbo” por
así decirlo. Simplemente se va gradualmente desvinculando tu atención fija en e
sueño a tu estado natural de realidad. Pero es como cuando estás durmiendo.
Cuando te levantas por la mañana te das cuenta que hay un periodo de transición
entre dormir y despertar.
Por eso la siguiente línea de ese párrafo
dice, “El período de
desorientación, que precede a la transición en sí, es mucho más corto que el
tiempo que tardaste en fijar tu mente tan firmemente en las ilusiones.” T-16.VI.8:5
Ese periodo de desorientación es del que
tú hablas. Pero sin embargo te ha tomado más tiempo fijar tu atención en la
experiencia física que lo que te tomaría en deshacerla. Es como cuando
construyes un edificio de 100 pisos de altura. Te puede tomar algunos años en
construirlo, sin embargo para demolerlo sólo toma unos segundos cuando se
sitúan explosivos en ciertas partes estratégicas de la estructura del edificio.
El perdón hace exactamente eso. Sirve como explosivos que se sitúan en ciertos
puntos estratégicos del inconsciente el cual una vez explotan se derrumba el
inconsciente completo instantáneamente.
Cuando dejas de tenerle miedo al Ser (a
tu realidad en Dios) entonces se deja el sueño a un lado y ahí te experimentas
una con tu familia, con todo, donde te das cuenta que es imposible perder nada
ya que todo es parte de ti. Así que tranquila, continúa disfrutando esos
espacios de comprensión que surgen, y cualquier sensación de miedo recuerda que
es simplemente una interpretación. Todo lo que necesitas hacer cuando esas
interpretaciones surgen es simple, solo recuerda que “nada de lo que veo (siento,
percibo) significa nada.” W-pI.1
Y aunque esas son palabras de referencia
que el curso utiliza puedes utilizar otras o inventar las tuyas pues a final de
cuentas las palabras son irrelevantes. Es la intención detrás de ellas. El
Espíritu Santo no necesita palabras, pues Él ya sabe. Y según tu deseo por la
verdad continúa incrementando el Espíritu Santo utilizará cualquier recurso que
sea necesario para apoyarte en el camino. En otras palabras, confía en el
proceso. Pues recuerda: “Si
supieras Quién camina a tu lado por la senda que has escogido, sería imposible
que pudieses experimentar miedo.” T-18.III.3:2
“¡Ay, criatura de Dios, si supieses lo
que Dios dispone para ti, tu gozo sería absoluto!.” T-11.III.3:1