Comentario: Los “perros” al igual que “nosotros” no tenemos ningún “propósito”. Sólo
que “nosotros”, la especie en este sueño que posee un intelecto y la capacidad
de “pensar” y “conceptuar”, a ese se le adjudica un “propósito”, el cual para
efectos, solo de lenguaje, es perdonar. Todos siendo procedente de una misma
mente, no implica que hay perros, seres humanos, al igual que toda la diversa
gama de formas. Implica que sólo hay una mente indivisible en todos los
aspectos. A eso se le considera como no-dualidad o Dios.
Con relación ahora al maltrato de animales, lo primero es
tener claro que el mundo es un holograma lleno de imágenes de todos los
“diferentes” colores, formas y tamaños. El “yo”, que me creo ser, también forma
parte de ese holograma. Solo que al percibirme “separado”, es lo que la mente
utiliza para mantener su atención en el sueño y pasar por alto que su realidad
es mente soñadora, mente Una, es Eso que lo abarca todo.
Cuando percibo en el mundo animales maltratados, que no
difiere de un terrorista, que no difiere de un niño abandonado, y a su vez, que
no difiere de su contraparte, algo que deseo obtener del mundo que valoro, todo
eso me pone en contacto con sentimientos y emociones profundamente ocultos, que
sino recuerdo mi propósito, el cual es perdonar, me creo toda la película. Ahí
es que se me olvida, una vez más, que soy la conciencia que muy amorosamente
observa sin juzgar. Recordemos que: "El perdón, en cambio, es tranquilo y
sosegado, y no hace nada..Simplemente observa, espera y no juzga."
W-pII.1.1.4:1,3
Así que, el problema nunca tiene que ver con lo que está
“ocurriendo” en el sueño, sino creerme el sueño como si fuese mi “realidad”. Al
creerme el sueño como mi “realidad”, tengo que entonces haber negado mi
Verdadera Realidad; que es Dios, que es Amor, que es Unidad.
Como podemos ver, tu pregunta, aunque en la superficie
aparenta ser una que quiere hacer una diferencia en el mundo y que viene de una
persona que se apiada, y que siente mucha compasión por los animales, en
realidad es una trampa que te montas para pasar por alto tu Verdadera Esencia.
Es por eso que Un curso de milagros nos dice, "No trates, por lo tanto, de
cambiar el mundo, sino elige más bien CAMBIAR DE MENTALIDAD acerca de él.”
T-21.In.1:7 Cambiar de mentalidad implica, reconocer su irrealidad, y de esa
manera no perder de vista lo único que es Real, el amor de Dios en ti.
Habiendo aclarado esto, la pregunta que puede surgir es,
¿eso implica que debo permitir que los animales sigan siendo maltratados y no
hacer nada al respecto? ¡No! Eso no es lo que implica. Pero lo que sí implica,
es desde donde estás haciendo lo que estás haciendo, ¿desde el juicio, el odio,
el victimismo? ¿O desde el amor, desde la paz, desde la comprensión?
Miremos esto juntos. Todo escenario que se proyecta en
este holograma llamado “mundo”, solo sirve para ponerme en contacto con todos y
cada uno de los obstáculos que se han interpuesto por antes Él. Si, por
ejemplo, experimento rabia al ver un animal maltratado, tengo que tomar
conciencia de que esa es MI rabia, y qué NO TIENE NADA QUE VER con lo que estoy
“mirando” “afuera”. Es por eso que hay lecciones del curso como las siguientes,
“No soy víctima del mundo que veo.” W-pI.31 “He inventado el mundo que veo.”
W-pI.32 “Hay otra manear de ver el mundo.” W-pI.33
Observemos cómo las lecciones 31 y 32 que acabo de
compartir nos llevan directamente a tomar completa responsabilidad de que soy,
como mente, no como persona, el responsable de el mundo que se proyecta. Luego,
la lección 33, sería la manera de invocar la percepción de el Espíritu Santo,
Mente Recta, Sabiduría Universal, Jesús, Dios, o como se le quiera llamar, para
que me ayude a poder ver ese mundo que fabriqué desde Su visión, desde el Amor.
Es así como esa rabia que había en mí puede ser
transformada en amor, en comprensión. Y las imágenes que se estaban
percibiendo, en este caso, animales maltratados, sirvieron de catalizadores
para que la rabia pudieses ser expuesta. Así es como se utilizan las imágenes y
las experiencia del mundo para sanar. Así es como la mente se libera y el amor
empieza ahora a regir nuestras vidas, no le juicio.
Una vez esto queda claro, que sería otra manera de decir,
una ves nuestro propósito está firmemente anclado, que ya dijimos es perdonar,
y esa no es la responsabilidad de ningún animal ni de ninguna "otra"
proyección del holograma, salvo que la mía, como parte del juego que está
teniendo lugar en este mundo, sin tomarse nada en serio, el amor mismo dirigirá
cada uno de nuestros pasos.
Siendo ese el caso, si sientes el llamado a hacer algo
con respecto a los animales maltratados, te encontrarás haciéndolo. La
diferencia es, en vez de entrar en ese vínculo separando a los animales y los
maltratadores EN TU MENTE como las “víctimas” y los “villanos”, serás la luz
que amorosamente apoya a esos animales a que se les de amor, y que
simultáneamente ve los maltratadores como el Santo Hijo de Dios inocente que
quizás en su niñez han sido maltratados, y lo que puedes brindar tú ahora a ese
escenario es comprensión.
Sólo en ese sentido, no sólo se les brinda ayuda a los
animales maltratados, sino que también los que maltratan a esos animales pueden
contactar con el amor en ellos que han olvidado a raíz de tu ejemplo. Y el
escenario ahora sirve para que todos sanen, incluido tú. O mejor dicho, SOLAMENTE
tú, ya que Tú (letra mayúscula) es lo único que hay.
Visto desde este nuevo prisma, ese escenario te aportó el
regalo de mirar tu propia rabia. Y como efecto secundario, el regalo de que un
animal pueda ser atendido, y el regalo de que un maltratador pueda ser sanado.
Pero eso sólo tiene lugar cuando TOMAS COMPLETA RESPONSABILIDAD de lo que
sientes, SIN CULPAR al escenario, SIN JUZGAR al escenario, permitiendo solo que
la luz que mora en ti guíe todos y cada uno de tus pasos. Y para que esto tenga
lugar se necesita COMPLETA HUMILDAD y un completo reconocimiento de NO SABER
ABSOLUTAMENTE NADA.
¿Por qué animales están siendo maltratados? ¿Por qué
nacen niños desvalidos? ¿Por qué existe el terrorismo en el mundo? ¿Por qué mi
pareja se fue con otro? ¿Por qué mi madre me abandonó? ¿Por qué, por qué, por
qué…? Nada de eso lo sabemos. Pero si cambiamos el “por qué” de cada
experiencia y situación por un “para qué”, ahora la respuesta es muy simple y
todo lo que tiene lugar en este holograma tiene perfecto sentido. Todo
"ocurre" para perdonar, para ayudarme a recordar que soy Amor ¡y nada
más!.