Las tres palabras por la que ser rige mi vida son el silencio, soltar y confiar. Me gustaría elaborar un poco sobre cada una de ellas para compartir cómo es que aplican a mi diario vivir.
Silencio: El silencio es ese espacio mental en el que puedo discernir conscientemente al igual que puedo ser consciente de mi naturaleza como totalidad. No estoy implicando que "yo" como personaje siento que soy la totalidad. Sino más bien, por momentos, cuando no hay una identificación con un "yo" me reconozco como parte de un espacio no local, del cual puedo ser consciente de que no hay separación entre "yo" y lo "demás". También me apoya a observar el contenido de la mente de manera más desapegada. Lo que eso implica, es que cuando me siento perturbado puedo observar la historia que la mente está fabricando Y simultáneamente darme cuenta que es falsa. Por lo tanto el silencio para mí es un espacio de exploración.
Soltar: La palabra soltar, como a mi me sirve, implica una rendición total a la experiencia presente. Una aceptación de lo-que-es, incluyendo los pensamientos y sensaciones. En ese sentido la lucha, el sacrificio y el esfuerzo dejan de tener sentido. Curiosamente, cualquiera podría interpretar esas palabras como decir que me quedo sentado en un colchón y no hago nada. Pero es todo lo contrario, la vida me va a llevar a hacer, sí o sí. La diferencia es que el hacer no lleva carga, es el fluir natural de la vida sin resistirla. Es así como el hacer, sea cual sea, está libre de sufrimiento. Un hacer que va a tener lugar de todos modos, lleno de contenido, de una mente no investigada por el silencio, es un hacer resistido, y eso es lo que se experimenta como sacrificio, como esfuerzo, como lucha.
Confianza: Esta es la clave fundamental. Aquí es donde se experimenta la paz interior. Cuando hay confianza hay paz. Y para mí, confianza y amor son sinónimos, solo que prefiero la palabra paz porque es más accesible y menos distorsionada de significado que la palabra amor. Cuando hay confianza en la vida la experiencia de soltar se convierte en algo muy natural. En ese sentido esta dos palabras van entrelazadas. Cuando no hay confianza soltar es imposible. Cuando hay confianza soltar es lo natural. Y cuando me cuesta soltar por falta de confianza, el silencio es al que puedo traer la mente para hacer un discernimiento y una exploración consciente de manera que pueda ser restaurada la confianza, lo cual me lleva a poder soltar libremente.
Si pudiese resumir esas tres palabras en una, seria perdonar. Pues, “El perdón, en cambio, es tranquilo (silencio) y no hace nada (suelta)..simplemente observa, espera y no juzga (confía).” W-pII.1.1.4:1..3